Domingo era efectivo como vendedor o como obrero. Todos sus pregones los hacía en versos cantados, con rima y armonía. Lo llamaban para realizar tareas, pero como habían otro trabajadores disponibles, lo relegaban con alguna frecuencia y él no olvidaba esa postergación y cuando era nuevamente solicitado paro otro trabajo, él ripostaba con estos versos: 'Cuando no encuentran o otro, me llaman a mí, me llaman a mí, pero ahora que tu a mi me buscas,pues ya yo me fuí,pues ya yo me fuí ' Y con esa perorata continuaba y no hacía caso al requerimiento. Tiene muchos versos parecidos, algunos impublicables. Vamos a dejarlo allí.
25 de octubre de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario